ASENSI
Y DIEZ MAS
--------------------------------------
El R.Madrid en Elche
--------------------------------------
Han sido 21, obviamente tantas como las temporadas del Elche CF en la 1ª división, las visitas del Real Madrid a terreno ilicitano. El balance es de 6 triunfos locales, 6 empates y 9 triunfos visitantes. La última victoria ilicitana data nada más y nada menos que de hace 42 años. Pero el partido que hoy recuperamos fue uno en que a pesar de ser en la jornada antepenúltima de la liga 1968/69, ya nada había en juego realmente para los madrileños, que ya se habían proclamado campeones la jornada anterior. El Elche, pese a estar en mitad de tabla, aún tenía que garantizar matemáticamente su permanencia, en una competición, como siempre muy apurada en la parte de atrás de la clasificación. También es de destacar que el Elche de aquel año se había convertido en el rey del empate y hasta ese partido llevaba nada más y nada menos que 13 sin ganar; 8 empates y 5 derrotas. Tres meses y medio, por ser exactos. El partido de finalmente la victoria fue el disputado en el campo de Altabix el 6 abril 1969 que acabó con el resultado final de 1-0 para los ilicitanos.
La historia del partido estaba
en que los madridistas necesitaban puntuar para seguir siendo aspirantes al
único equipo en ganar la Liga sin derrota alguna. Y de eso fue de lo que se habló hasta la
saciedad en la prensa madrileña del momento, que enmarcaba esos últimos
partidos de liga de los blancos en ese contexto y con una grandilocuencia
habitual del momento. En ello tuvo importancia precisa el diario As. Este
periódico llevaba poco más de un año en circulación y básicamente dio un
sensacional tirón a la información deportiva a nivel nacional, pues esa era su
distribución. Su gran novedad era su impactante cobertura gráfica (huecograbado
en terminología de la época) algo hasta entonces desconocido. Además, el hecho
de estar disponible en los kioscos de prácticamente toda España a partir de
media mañana cada día ofreció un gran espaldarazo al seguimiento del R. Madrid
en todas partes. La prensa de Barcelona, por ejemplo, no llegaba a los kioscos
de Elche hasta bien entrada la tarde, cuando no al día siguiente.
El Elche de ese año, recordado
por la posterior gesta en el torneo de la Copa del Generalísimo, donde se
llegaría hasta la final, sin embargo en liga también fue un buen equipo, con un
juego preciosista, algo que entonces solo estaba reservado a los equipos de muy
arriba. Se le solía comparar, en cuanto a ese juego, con la UD Las Palmas,
subcampeón de liga aquella temporada.
No olvidemos que aquella fue
la temporada en la que llegaría a Elche Roque Gastón Máspoli. Máspoli había
sido el legendario guardameta y capitán de la selección uruguaya campeona del
mundo en 1950, en aquel partido contra la selección de Brasil, comúnmente
recordado como el ‘maracanazo’. Suya es la célebre frase en el palacio
presidencial uruguayo en los festejos dedicados a la selección charrúa: ‘Si
llegamos a saber el dolor que íbamos a causar, no hubiéramos ganado el partido’,
refiriéndose a la ola de tragedias que provocó en suelo brasileño aquella
derrota. Roque Máspoli venía de hacer campeón ese año al Peñarol de Montevideo.
Máspoli se encontraría una
plantilla con el traspaso de Lico al Español y con la llegada de dos ilustres
veteranos precisamente desde el R.Madrid: el portero Araquistáin y el extremo
Fernando Serena. Pero el gran fichaje para el Elche Cf aquel año fue la del juvenil
Juan Manuel Asensi, que todavía con 19 años y aunque ya había sido habitual en
las alineaciones el año anterior, ésta fue la campaña de la explosión total de
su juego. Asensi era un chico de Alicante que había sido captado en su etapa
colegial, cuando jugaba en el equipo de los Salesianos de Alicante. En aquel
entonces el Elche Cf era un equipo ya asentado en la máxima categoría, mientras
que el equipo de la capital, el Hércules, se debatía en la 3ª División. Fue
fácil la elección. Juan Manuel Asensi jugaría 95 partidos con el Elche,
marcando 25 goles. Centrocampista todo pulmones que podía adaptarse a extremo
izquierdo, tenía una poderosísima llegada a gol, no tienen más que ver su ratio
de eficacia. Con un excelente toque y potencia que le permitía poder asumir el
mando del equipo y tirar de él hacia adelante. No en vano llegó a debutar con
la selección nacional estando en el Elche y el resto de su historial con el FC
Barcelona ya es sabido.
Pues junto con Asensi, aquel
partido tuvo otro héroe inesperado en las filas franjiverdes: Curro. Miguel
Gómez Burgos, extremeño de Mérida, que se había formado futbolísticamente en
las categorías inferiores del Elche, donde luego permaneció durante seis años en el primer equipo.
Un futbolista de trabajo y potencia, no exento de buena técnica. Y que marcaba
goles pese a su posición de interior retrasado. Aquel gol al inicio de la
segunda parte en el partido que nos ocupa fue seguramente su logro más
recordado. Un gol conseguido al rematar de cabeza rodeado de contrarios una
falta sacada desde el lateral por Casco, otro de los destacados del Elche,
junto con también Vavá. Velázquez fue el mejor por el lado madridista.
El partido fue uno de los mejores de la temporada por parte del Elche, que desarrolló un juego desbordante y con total control en el centro del campo. Esa victoria sirvió para prácticamente asegurar la categoría. Un par de meses después llegaría la gran actuación en el torneo copero.
Pero el partido ha pasado a la
Historia de nuestra Liga por la ruptura de aquel récord del R. Madrid gracias
al incansable Asensi y al oportunismo del gol de Curro.
JP
Comentarios
Publicar un comentario