UNA NUEVA ERA EMPIEZA EN
VITORIA
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El partido de este domingo en
Mendizorroza entre Dep. Alavés y Elche CF, primero en la máxima división entre
ambos conjuntos, es más de lo que aparenta a priori. Probablemente tiene una
trascendencia que va más allá de la simple semántica de la disputa, ya de por
sí importante, de los puntos en juego. Y es que una vez sobrepasados los
primeros encuentros ‘de tanteo’ o ‘de gracia’ a partir de ahora ya lo que se
viene es puro material de examen directo. El equipo está completo y ya la
excusa de conjunción y preparación ya no va a ser más que eso: una simple
excusa. Y convendría dejar de lado para siempre esas dichas excusas. En otras
palabras, lo que veremos en adelante será desnudamente la vis futbolística de
nuestro Elche CF, para bien y para mal.
Terreno Jorge Almirón ya
entonces. Sabemos que todo es cuestión de adaptación, rodaje, ensamblaje. Igual
o parecido que la mayoría de equipos de nuestro nivel. Por eso será muy
definitorio la declaración de intenciones que el Elche CF argumente en Vitoria.
Es el momento. Torpe sería ir con medias voluntades o medias ideas. El sumum, pues,
será comprobar si vamos a ir a adaptarnos a lo que vaya surgiendo en cada
partido o ir con la fuerza de tener una personalidad propia, ocurra lo que
ocurra. Obvio decir que sería preferible lo segundo.
Porque, seamos claros: hasta
la fecha la línea mostrada por el Elche en los 270 minutos de competición ha
sido bien triste. Nada de juego, pero 4 buenos puntos…que no nos deben validar
lo expuesto de ningún modo. Los puntos en el zurrón han sido más deméritos de
los atacantes de Eibar y Huesca que méritos de nuestra defensa, incluso
valorando positivamente la demasiado loada ‘disciplina defensiva’. Pero incluso
si nos fuéramos a la mera y fría estadística, los equipos rivales han dispuesto
de más o menos 30 remates nítidos, frente a solo 4 nosotros. En números: 0.10
de déficit por remates concedidos contra 0.25 exitoso en remates realizados. La
simple línea probabilística nos llevaría a un fracaso seguro. Pero, es preciso
recordar que para ganar partidos es preciso al menos pasar del centro del
campo?
Todo el proyecto Christian
Bragarnik tomó cariz la tarde-noche del pasado 5 Octubre, cuando se jugaron
naipes ganadores de poder en adquisición de efectivos. Mucho se ha hablado de
la ‘argentinización’ de nuestro club. Nada ajeno si miramos las décadas de mejor
desempeño cuando el Elche CF era al menos tan famoso como los grandes españoles
en Paraguay o Argentina. Particularmente me siento orgulloso de ese rasgo
diferenciador. Argentina siempre ha sido sinónimo de buen gusto futbolístico y
por esa vertiente nos llena de esperanza la existencia de este nuevo atributo difusor. Que se ha de aprovechar en la cancha.
Por eso, insisto, es
trascendental lo que Jorge Almirón ‘invente’ en el terreno alavesista. Su
música ahí será la que hará vibrar en clave de ilusión nuestro pentagrama. Y,
pese a lo que se puede oír en muchos rincones, yo seré uno de los que me
sentiré contento con un juego dominador, o al menos que lo intente ser,
olvidándome de la bonanza o no de un resultado. En el fondo el debate está muy
jugado desde hace casi medio siglo. Menottistas frente a bilardistas. Y
recordemos que César Luis Menotti ganó una Copa del Mundo.
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